viernes, 21 de abril de 2017

Yo Soy; Leonardo Mallea. Historia de un candidato, presente de una comuna.




Leonardo Andrés Mallea Zapata es candidato a CORE por la circunscripción provincial Santiago III, que comprende las comunas de Cerrillos, Estación Central y Maipú. Cerrillano de toda la vida, vecino de la población San Martín, entre otras características revela tener una capacidad de imitación similar a la de Kramer, la que lo ha llevado a ser el doble de Vicentico incluso en un programa de TV, nos cuenta que se impresionó con el género musical llamado “milonga” durante un viaje que hizo en bicicleta por Argentina, tanto así que hoy lo incorpora cada vez que puede en sus proyectos artísticos. Casi como Condorito, ha pasado por todas: Técnico en computadores, mecánico, gestor cultural, dirigente social y harto más es lo que ha construido la trayectoria de Mallea, acá nos lo cuenta…


Varias historias te caracterizan, esto estará difícil, pero trata de resumir y sintetizar un comienzo, ¿dónde parte todo?

Estudié en la Escuela Industrial Particular de Cerrillos, conocida como “La Cacharrito”, luego me especialicé en Mecánica, área en la que trabajé un tiempo, tras 5 ó 6 años estudié Armado de Computadores gracias al programa Chile Joven lo que me permitió trabajar 4 años en la Universidad del Desarrollo y otros 4 en la Academia de Humanismo Cristiano como encargado de laboratorio y como técnico en mantención de equipos computacionales, en esa época tuve un primer acercamiento a la música desde una banda llamada Anexia, junto a 2 grandes amigos (Juan Ruiz y Rodrigo Donoso), llamábamos a nuestro estilo “Romántico – Depresivo”, era como un rock latino oscuro que tenía como influencias a The Cure, Placebo, pachanga y por supuesto rock latino. Dejé la música porque tenía un pánico escénico tremendo, al punto en que era un verdadero problema para la banda y para mí, me cortaba entero en cualquier escenario. En todo caso siempre continué haciendo canciones, con mi guitarra y mi armónica, pero esas canciones eran pa mí nomás, no las compartí con nadie.


Nos llevaste de una a lo artístico, a lo musical. En tu caso aquello ha ido siempre de la mano con lo político, ¿es así?

Tal cual, cacha que por el año 2010 en plena campaña de Pepe Auth como diputado y cuando se perfilaba Arturo Aguirre como alcalde, mi papá – que siempre fue bien metido en política y trabajaba en sus campañas - hizo un asado en la casa donde terminé cantando temas de Leonardo Favio y de Vicentico, mi viejo cachaba quizá que yo tenía aptitudes y que la música me gustaba, recuerdo que le dio harto color con que tenía a un tremendo artista que iba a sorprender, los tenía a todos metidos cuando me presentó, ni yo cachaba que se refería a mí, recuerdo que estaba haciendo un registro audiovisual cuando tuve que apechugar nomás y ponerme a cantar, dejé la cámara tirada y me embalé, me encantó esa experiencia, parece que la gente que estaba allí percibió eso y también les gustó, tanto así que me invitaron a las siguientes actividades de campaña. Hubo una actividad en particular, en el Centro Cultural Cerrillos, donde quedó literalmente la cagá, recuerdo haber cantado unos temas de Leo Dan y la gente se motivó caleta, el mismo Pepe Auth me pidió que siguiera así que agarré vuelo, canté algunas de Los Prisioneros y hasta me aventuré a presentar temas propios, esa aceptación hizo que fuera tomando confianza como cantante, al punto que de ahí en adelante cerraba yo todas las actividades en el Centro Cultural.


De nuevo te fuiste a lo musical, quiero que vayamos más a lo político pues, no te me arranques. Seré directo entonces, ¿Cómo te involucraste en la dirigencia social?

Mira, fue en la misma época de la que te hablaba antes, año 2010 más o menos, el alcalde de Cerrillos era en ese tiempo Alejandro Almendares, un tipo de derecha, autoritario, militante RN que llevaba 4 períodos ininterrumpidos, desde el 96, era mucho. Bueno, más allá de cualquier visión política te puedo contar mi opinión personal, que era bastante negativa principalmente porque no veía espacios para los jóvenes, para la cultura, para el arte, para la música, estábamos más silenciados e invisibilizados que la cresta, abandonados. Por otra parte se notaba una comuna sucia, con delincuencia, sin vecinos organizados, sin diálogo, no habían canchas de fútbol decentes, el tono de la administración era reactivo y asistencialista. Queríamos que se fuera Almedares, así de corta. En el contexto de la llamada revolución pingüina, surgió en la comuna un movimiento en el cual - si bien no fui miembro - apoyé bastante llamado JUCE (Juventud Cerrillos) con ellos colaboré en la organización de diversas actividades donde la idea central era por supuesto visibilizar y apoyar las demandas de los secundarios, explicitar las necesidades de los estudiantes pero también en estas instancias comenzó a surgir espontáneamente la idea, la necesidad, de que se fuera el alcalde. Realizamos micrófonos libres, tocatas, marchas, cacerolazos, en cada uno de los cuales llegaba más y más gente, estábamos en un inicio apoyados por el movimiento pingüino pero de a poco se fueron sumando actores culturales, sociales, organizaciones, juntas de vecinos, incluso partidos políticos como el PC o el PS, tomó un tono muy territorial y local este movimiento, estas acciones que estábamos llevando adelante, no era raro lograr convocar a 300 personas en una actividad, en algunas hasta 500. Lo bonito es que acá organizábamos y convocábamos todos, nadie destacó como líder o cabeza de esto, se trataba de una orgánica ciudadana, transversal, que terminó articulándose bajo el nombre de Cerrillos Abre los Ojos (CALO), un colectivo vecinal del que soy parte y existe hasta hoy.


En ese contexto, ¿quizá hubo alguna instrumentalización por parte de Aguirre, el actual alcalde de Cerrillos, o quizá un acercamiento entre ustedes y él? Pasa mucho que algunos “líderes” se apropian de éxitos ciudadanos y terminan llevándose el crédito.

Mira, como colectivo no apoyamos a Arturo Aguirre, teníamos diferencias evidentes con él, lo que nos hacía converger era que definitivamente no queríamos la continuidad de Almendares, pero nunca al nivel de ser una fuerza que lo siguiera. Nuestras ideas y acciones siempre fueron más radicales y rupturistas, más directas que la simple discusión política. Armamos de hecho una contra-campaña, no violenta pero sí directa, a cada rayado de Almendares le escribíamos “FUERA”, recuerda que en ese tiempo no estaba regulado el tema de la publicidad y difusión en las calles, en los muros. Por otro lado quienes conformábamos el CALO veníamos más de organizaciones que se levantaban en torno a demandas específicas, como grupos de vecinos que requerían soluciones de acceso a alcantarillados, a viviendas, mejoras en infraestructura pública, otros que exigían mayor seguridad, más espacios culturales, éramos y somos mucho más que un movimiento político, que una instancia electoral. Desde allí la única vez que apoyamos a un candidato fue a Marcel Claude en las presidenciales del 2013 y fue tras una serie de discusiones internas, de debates, con el objetivo principal de cuantificar nuestra incidencia y también porque no nos identificaba ni Bachelet ni Matthei ni MEO, igual te reconozco que nos atrajo la figura de Roxana Miranda en esa época, pero decantamos por Claude.




Los 15 minutos de fama

Mallea fue el doble de Vicentico en un conocido programa de talentos y aunque resulte difícil encontrar la conexión, esta experiencia – nos revela – le hizo de algún modo reencontrarse con toda una tradición de vocación social muy arraigada en Cerrillos que recibió de su padre y de su familia, así se refiere a aquel episodio:

Mi papá es militante del PC, de la vieja escuela, de él heredé un gusto por lo social sin duda, durante toda mi infancia me relacioné con la orgánica comunista, me gustaba y representaba caleta, tanto que quise muchas veces ser militante yo también, de hecho creo firmemente que alguien con formación comunista es un aporte excepcional en cualquier articulación ciudadana, conocer el funcionamiento comunista es una tremenda escuela política, en cualquier instancia que requiera de organización y compromiso, eso por un lado. Por otro mi familia, tanto por el lado Mallea como por el lado Zapata es bien numerosa en Cerrillos, entones prácticamente tengo tíos y primos en cada barrio de la comuna, gracias a eso he conocido diferentes realidades y problemáticas locales, estoy siempre informado de primera fuente respecto a qué está pasando en nuestras calles, al tanto de nuestra contingencia cerrillana. Aunque no lo creas lo que finalmente hizo que me metiera de lleno en lo social y político, en la representación popular, en sacar la cara por un barrio, por los vecinos, fue mi paso por un programa de talentos, incluso me ayudó caleta en lo que respecta a desplante frente a la gente, en un escenario.


A ver, desarrolla esa idea que suena sabrosa e interesante…

Los vecinos que me cachaban en el barrio y en la comuna se juntaba en las casas, en los restoranes a ver el programa, me emocionó caleta cuando clasifiqué en el casting escuchar gritar a todos en mi cuadra, como cuando mete un gol la selección, una weá de verdad increíble, ese fue el único programa grabado porque los demás fueron en vivo y no pude experimentar esa emoción en el barrio, pero todos me lo hicieron sentir, me lo transmitían de muchas formas, un apoyo muy enriquecedor, de verdad conmovedor, me llevaban regalos pa la casa, globos, chocolates, carteles, harto cariño de la gente. Había vecinos y amigos que estaban pasando por situaciones económicamente duras, pero aun así mandaban mensajes de texto apoyándome, no es poco si consideras que cada uno salía como 300 pesos, ahí comencé a asustarme, hasta le pedía a la gente que no gastara sus lucas en eso, que mejor no me apoyara, me afectaba caleta. Te das cuenta que un programa que genera millones en ingresos por publicidad, que gana cualquier plata, le pide a la gente que gaste su platita en mandar un mensaje, terminaban recibiendo 15 millones de mensajes, no poh, eso no corresponde, a los participantes no nos pagaban además, aunque me importaba aquello, simplemente te grafico que estos locos del canal ganaban por todos lados. Te encuentras de frente con una tontera muy injusta, un viejito de la cuadra dejando de comer pan por apoyarte con un mensaje, por votar por ti, dentro del programa comenzamos a denunciar estas situaciones, a mostrar el descontento, casi armé un sindicato de participantes, quizá finalmente eso terminó haciéndome salir eliminado, no lo sé. Bueno lo importante es que tras esa experiencia le tomé el peso a lo que significa representar a mis vecinos, a mi barrio, a mi comuna, hay una responsabilidad gigante allí, te das cuenta también que hay espacios que puedes utilizar para entregar mensajes, para generar acciones, para producir transformación social.


Quiero abordar la historia en todas sus dimensiones… ¿Qué ocurrió en tu cabeza cuando decidiste ir al casting de este programa de TV y más aún, cuando te dijeron que quedabas?

Me habían despedido de la Academia de Humanismo Cristiano así que recibí el finiquito y con esas lucas quise darme un gusto, me fui a Horcón a puro descansar y carretiar, durante una semana, venía trabajando desde hace muchos años y sentía que me merecía parar un rato. Lo que hice esos días fue componer música y sobre todo cantar, todo el rato, cantar y cantar, allí caché que el Vicentico me salía bastante bien, me convencí que podía imitarlo de manera casi perfecta, volví a Santiago con esa idea dando vueltas en la cabeza cuando caché lo del casting pal programa “Yo Soy” del Megavisión y partí para allá nomás. Llegué súper temprano, había como 4 personas, también uno que otro apitutado, pero igual entré más o menos rápido, me sentaron frente a la cámara, estaba la productora enfrente y partí, canté “Los Caminos de la Vida”, en eso la productora pide que apaguen la cámara y llama por su celular a alguien, yo cagao de susto, me volvió en mala el pánico escénico, estaba todo cortado, ahí escucho que ella dice por el teléfono “weón, tenemos a Vicentico”… Ahí empezó una vorágine de viajes, escenarios, salas de maquillaje, producción, estudios de TV, luces, clases de canto, de baile, de interpretación, caracterización, fue una experiencia muy de rockstar la verdad.




Leo Mallea, el candidato

Cuando hablamos sobre cualquier aspecto o episodio de su vida, nos entrega detalles e historias que darían para escribir un libro, transmite simplemente haber disfrutado a concho cada momento, se nota un tipo tan feliz como disperso. Llega el momento de abordar su candidatura a CORE y la entrada directa en arenas políticas. En sus palabras, esta es la transición desde su paso como el Vicentico de “Yo Soy” hacia una candidatura a CORE por el Frente Amplio:

Tras la experiencia seguí este camino que busca construir instancias artísticas, culturales, pero también políticas y sociales, comencé a utilizar esta muy pequeña y pasajera “fama” para generar alianzas, abrir espacios, tanto para quienes conformábamos el CALO como para cualquiera quien lo requiriera en la comuna, nos asociamos por ejemplo con el Centro Cultural Víctor Jara, comenzamos a armar escenarios donde se presentaban los artistas y bandas locales, apoyamos el trabajo de juntas de vecinos, clubes deportivos, organizaciones de distinta índole, comenzamos a hacer actividades cada vez más grandes y masivas, dimos vida a proyectos musicales como “Los Gordon” (ya extintos) y lo que es actualmente “Manual de Carroña”, agrupación que pretende reestructurar y replantearse las actuales normas, protocolos, con letras muy agujas e incisivas, denunciar lo que no nos gusta de la sociedad, con crítica y harto humor también, haciendo canciones que la gente pueda tocar en sus casas con cualquier cosa, con ollas, escobas, cucharones, qué se yo… Algo cercano, accesible y lúdico. Armé también mi propia productora llamada “La Kacerola” donde estamos trabajando con varios artistas desde la autogestión y la calle, produciendo hartas cosas entre ellas una alianza con una popular y muy respetada radio de Estación Central por ejemplo. Estoy también con el tributo a los Fabulosos Cadillacs llamado “Los Cadillacs Piratas” y como doble de Vicentico en algunas presentaciones. En todo aquello le damos actualmente, haciendo hartas cosas.


¿En qué momento exacto decidiste ser candidato, de qué manera se gestó aquella decisión y qué proyectas si eres electo?

Me lo propuso Claudia Mix, ex candidata a la alcaldía en Maipú y ex candidata a diputada por nuestro distrito, gran amiga a la que conocí hace un tiempo en el contexto del movimiento “Todos a la Moneda” que se generó tras la figura de Marcel Claude como candidato a la presidencia, a quien nosotros desde el CALO también estábamos apoyando. La pensé caleta, me costó mucho tomar la decisión, de hecho había recibido antes propuestas para ser candidato a concejal en Cerrillos pero las había desechado, sentía que mi espacio estaba en la organización social más que desde un cargo de representación, estaba además bastante desilusionado de los partidos en general, desconfiado de los movimientos políticos que se estaban gestando. Conversé con mi familia, amigos, con los compas de CALO antes de lanzarme como candidato a CORE, el empujón final fue una conversación con mi viejo, me transmitió que asumir una candidatura como esta era hacerse cargo de una lucha que tanto él como yo veníamos dando hace rato, por el barrio, por los vecinos, por la comuna, por otro lado me hizo sentir que efectivamente es hora de que tipos de la calle, de la población, aspiren a cargos de relevancia y de representación, creo que tiene toda la razón pues, y más allá de eso, sus palabras me hicieron mucho eco, son lo que siento. Junto con decidir ser candidato, opté también por firmar como militante en el partido Poder Ciudadano (al cual pertenece Claudia) porque me sentí absolutamente en libertad de hacer lo que yo estime, que en el fondo es hacer lo que las bases estimen, lo que se determine de manera colectiva y consensuada, creo que es un espacio pluralista y consecuente. Como candidato a CORE no puedo prometer nada, las promesas no tienen mucha relación con el cargo y por otro lado esos ofertones electorales son generalmente puras mulas, lo que espero es tomar decisiones incluyendo las visiones de los actores sociales, de la gente de la calle, de las poblas, de los barrios, trabajar con y para ellos, que en el fondo es lo que hemos venido haciendo desde hace rato, salvo que ahora sería desde la posición de CORE.


¿Qué nos cuentas respecto a tu visión y relación con el Frente Amplio?

Antes de pertenecer a él y mirando desde fuera, tenía caleta de dudas, esa falta de convicción por ejemplo de no ser capaz de declararse de izquierda me empelotaba, aun me empelota de hecho, pero hoy creo que tiene sentido, logro entender la propuesta y la visión. Me parece que es totalmente cierto el que el Frente va mucho más allá de la izquierda y la derecha tradicionales, por ejemplo ha sido una crítica recurrente el decir que le hacemos el juego a la derecha, creo que no es así, tengo la certeza de que el Frente Amplio se apropia de un espacio y de un electorado que no le pertenece ni a la derecha ni a la izquierda, ni a la Nueva Mayoría ni a Chile Vamos. Me identifica también del FA que hay una intención real de incluir a las bases, de integrarlas y ponerlas en el centro de la construcción programática, hay que trabajar bastante por supuesto, pero para eso estamos acá, para trabajar.


Ya, juégatela con un candidato presidencial del Frente Amplio, Sánchez o Mayol.

Entre ellos 2 me inclino por Sánchez, aunque si depende de mí, nuestro candidato debiera ser otro: Mesina, pero como sabemos él ya le cerró la puerta al Frente Amplio. De igual modo más importante es el programa que el candidato, en eso no hay duda.











Mucho se habla hoy – sobre todo desde el mundo ajeno al duopolio, ya que este aún vive en el siglo XX – de la necesidad de dejar atrás el modelo neoliberal, las estructuras imperantes propias del capitalismo y el mercado, donde somos consumidores más que ciudadanos, ese discurso viene generalmente desde voces que se notan tan acomodadas en este mismo modelo que critican, que resulta difícil creerles, se les recibe más casi como un mal chiste que como una arenga motivadora. Si propones una nueva mirada, es requisito mínimo que vivas aquello de lo que hablas, que sea una cosmovisión incorporada más que un discurso aprendido. En este contexto y más aun considerando que estamos en año electoral, urge visibilizar candidatos, opciones, propuestas, que vengan en mayor medida desde las experiencias que desde las ideas, que estén ya viviendo desde la independencia, desde el emprendimiento, desde la autogestión. Es sencillo cambiar el modelo neoliberal cuando eres ingeniero, abogado o un profesional cualquiera cortando un buen sueldo a fin de mes, cuando tienes tus necesidades cubiertas y tus redes jugando a favor, pero quienes lo cambian de verdad son aquellos que están armando su propia forma de subsistir, desde la consecuencia y coherencia, desde el riesgo, desde el día a día. Acá tiene un buen ejemplo, se lo acabamos de presentar.


Puede revisar la jornada clasificatoria de Leonardo Mallea en el programa "Yo Soy", emitido hace unos años por TV abierta pinchando acá.